Plantearse el presente y futuro de la pintura hoy en día es adentrarse en un terreno difícil de clarificar. En una época donde las diferentes disciplinas artísticas tratan de tomar posiciones en lo referido a sus discursos y expectativas, la pintura se plantea dos opciones: por una parte la recreación en sí misma recurriendo a la historia e insistiendo en los mismos enunciados y patrones; por otra, adaptarse a los nuevos tiempos.
La exposición ¡Ni en pintura! propone una revisión por estos nuevos caminos que afronta hoy en día la pintura, y cómo su adaptación a la situación actual desde un enfoque más innovador y contemporáneo contribuye a una nueva manera de percibirla y de sentirla.
Observaremos cómo a través de las diferentes expresiones artísticas el proceso de trasformación de la pintura se va despojando del lastre de su pasado dando un paso hacia delante para plantearse, no como una consecución en sí misma, sino como origen y raíz de la misma producción artística, con carácter experimental y vinculada a otros medios expresivos y de representación visual.
La pintura se trasforma en la fuente del actor creativo, un concepto que reflexiona sobre sí mismo, con capacidad de asimilar y llegar a entender el mundo desde infinidad de perspectivas. Es a través de su “derrota” donde se significa, y al prescindir de la técnica pictórica -incluso subvertirla- se evocan y se abren nuevas rutas para procurar transmitir las mismas emociones.
A través de unos estilos, formas y procedimientos muy definidos por cada artista se resalta una clara intención de análisis, búsqueda en investigación sobre las nuevas capacidades de la pintura. De esta manera se puede abrir su análisis crítico, un proceso de reflexión y autoconocimiento pretendiendo que, desde las diversas alternativas estratégicas y soportes, se favorezca cierta complicidad y se arme un discurso integral sobre las nuevas maneras de explorar y repensar la pintura.
Patricia Garrido